Foto coloreada de un bautizo en la puerta de la iglesia de Plenas. Fuente: Josefina Gracia.
martes, 25 de agosto de 2020
Foto de boda
A los lados, Bárbara Gracia y Cesáreo Gimeno, padrinos de boda de Valero Luño Bailo y María Martínez, padres de Leoncio, Apolonia y José Antonio (años 40). Fuente: Leoncio Luño.
Foto antigua
Benjamín Martínez con sus hijos Marciano, Ignacia (casada don Antonio Torres) y María (casada con Valero Luño Bailo). Principio de los años 20. Fuente: Leoncio Luño.
viernes, 21 de agosto de 2020
Buena cocina
Alfonso Martín, plenero y desde hace un montón de años residente en Barcelona, ha puesto la nota muy alta en el mundo de las paellas y los caracoles. Ahí va la muestra. ¡Enhorabona!
Plenas en Aragón Televisión
El jueves, 13 de agosto, Aragón Televisión acudió Plenas para grabar parte un programa llamado “Encontrados”, guiados por dos estupendos profesionales, Guiomar y Chema. Decimos parte, porque la otra, se emitirá en directo en el mes de septiembre. Se hablaron de cosas relacionadas con nuestro pueblo, por ejemplo los murales que hay por algunas faachadas y el Museo Etnográfico dedicado a nuestra paisana y heroína de los Sitios, "Manuela Sancho Bonafonte". Entre otros, dieron su parecer el amigo Valero Yus, jota que cantó José Luis Ballestero… Seguro que nos gustará. Lo avisaremos cuando tengamos noticias del día de su emisión.
miércoles, 5 de agosto de 2020
Articulo sobre Molinos
En el número 17 de la Revista Crisis publiqué un artículo sobre los molinos de viento que a continuación os pongo aquí:
MOLINOS DE VIENTO Y PAISAJE
Ángel Tomás del Río
Procedo de la Comarca de Belchite y en los últimos tiempos están surgiendo molinos de viento como setas por todo su paisaje y por el norte de Teruel. Entre sus habitantes hay opiniones de todo tipo, a mucha gente le parece bien pues son territorios que están cansados de esperar que la Administración se acuerde de ellos, y año tras año ven pasar oportunidades y los pueblos se van despoblando y envejeciendo, y los pocos habitantes que quedan están desanimados y no le ven ningún futuro al pueblo, y lo único que les ofrecen es esto, la instalación de molinos de viento. Están en el dilema de si dejan pasar esta oportunidad igual ya no tienen ninguna otra en años ¿qué hacer? A muchos no les gusta pero “algo es algo”, migajas. Las empresas buscan territorios donde haya poca contestación social. A este paso toda la comarca estará colonizada por molinos. A veces, cuando veo los molinos desde lejos, me parecen las cruces de un inmenso cementerio. Otros muchos habitantes estamos recelosos..
¿Parques eólicos, si o no?
Siempre hay que decir: “parques eólicos sí”. Si, pero no así. El cambio climático que sufrimos y la obligada defensa del medio ambiente nos exigen estar a favor de las energías renovables y los parques eólicos, en particular, han demostrado su capacidad de producir gran cantidad de energía eléctrica con una mínima contaminación ambiental. Pero estar a favor de la energía eólica, no significa estar a favor de la ubicación indiscriminada de aerogeneradores por toda la geografía. La implantación de parques eólicos en el territorio debe basarse en tres criterios:
1) Situación de los parques eólicos en una zona donde exista más recurso eólico aprovechable que en otros lugares
2) Situación de los parques eólicos cerca de las zonas donde mayor energía eléctrica se consuma para evitar las pérdidas por el transporte
3) Situación de los parques eólicos en zonas donde su instalación no implique un fuerte impacto ambiental o paisajístico.
Normalmente, sólo se tiene en cuenta el primer criterio: zonas de mucho viento. Sin embargo, como los parques eólicos suelen ser molestos e incompatibles con otros muchos aprovechamientos del territorio, tienden a situarse en zonas despobladas o con poca densidad de población, que curiosamente son las que menos energía eléctrica consumen y las que gozan de una mayor riqueza ambiental, faunística y paisajística.
¿Cómo afectan los molinos de viento al patrimonio cultural?
El patrimonio cultural, según la UNESCO, es la herencia cultural propia del pasado de una comunidad, mantenida hasta la actualidad y transmitida a las generaciones presentes, y puede ser material (edificios, yacimientos arqueológicos, obras de arte), inmaterial y natural (paisajes, bosques)
De todas las afecciones al patrimonio, la mayor es, sin duda la que afecta al paisaje, pues transforma enormemente su contemplación.
El CONVENIO EUROPEO DEL PAISAJE, en su Preámbulo señala (…) que el paisaje desempeña un papel importante de interés general en los campos cultural, ecológico, medioambiental y social, y que constituye un recurso favorable para la actividad económica y que su protección, gestión y ordenación pueden contribuir a la creación del empleo.
Que el paisaje contribuye a la formación de las culturas locales y que es un componente fundamental del patrimonio natural y cultural europeo, que contribuye al bienestar de los seres humanos y a la consolidación de la identidad europea.
Que el paisaje es un elemento clave del bienestar individual y social y de que su protección, gestión y ordenación implican derechos y responsabilidades para todos.
Las zonas más despobladas, las elegidas prioritariamente para la implantación de aerogeneradores, muchas veces en terrenos elevados, son las que a lo largo de los siglos han podido preservar de mejor manera su paisaje.
La afección de la construcción de los parques eólicos es de cinco tipos:
1) La presencia de los propios aerogeneradores, con alturas de buje de 80 m. y aspas de 60 m, con una altura total de 140 m.
2) Los tendidos eléctricos nuevos con apoyos de más de 30 m. de altura
3) La construcción de las subestaciones de transformación eléctrica
4) La apertura de caminos muy anchos para ir a cada uno de los aerogeneradores, con la alteración de los caminos y veredas tradicionales
5) El enorme movimiento de tierras tanto para la excavación de los cimientos como para la construcción de los caminos, con los posibles daños que se puedan producir en yacimientos arqueológicos no detectados previamente en la zona
Además, estamos introduciendo unos elementos de gran impacto visual sobre un paisaje de gran visibilidad (desde los núcleos de población y vías de comunicación), de gran calidad paisajística y de extraordinaria fragilidad (muy poca capacidad para absorber los cambios que se producen en él).
Además, al no tratarse de un solo aerogenerador, sino que son varias decenas, el impacto ambiental es acumulativo, lo que nos origina un impacto paisajístico irreversible, irrecuperable y crítico.
Transformar en terreno industrial y degradar lugares de alto valor paisajístico tiene un fuerte coste económico y social. El paisaje es determinante a la hora de valorar una zona, de tal forma que si las condiciones paisajísticas disminuyen, disminuye la atracción por esa zona. Cuando se publicita el turismo rural de una zona, se remarca la belleza de su paisaje, la ruralidad del entorno, el silencio, la tranquilidad, que son valores muy apreciados por los habitantes de las ciudades. Todos valoramos más unos paisajes u otros, y nos desplazamos a otros sitios para ver paisajes atractivos
Así pues, al reducirse la calidad paisajística disminuyen las posibilidades de explotación turística del territorio y disminuye su capacidad para actividades al aire libre, y origina que no se alquilen las viviendas y que la población de los núcleos rurales vaya reduciéndose progresivamente, disminuyendo considerablemente el valor económico de las viviendas y de los terrenos.
El paisaje confiere valor añadido a los productos y a los servicios que pierden prestigio al perderse el carácter natural del entorno y disminuye el consume de productos típicos de la zona. La agricultura ecológica tiene difícil el prosperar en paisajes repletos de molinos de viento.
Si se degrada el paisaje, se degrada el patrimonio cultural y degrada socialmente los núcleos de población cercanos y también produce efectos psicológicos negativos en los habitantes de estos pueblos. Se pierde tranquilidad y se limita la capacidad de “disfrutar de la vida”. Los valles, las montañas ya nunca vuelven a ser los mismos que eran. Le Corbusier, no en vano, escribió que “llanuras, colinas y montañas contribuyen también a modelar una sensibilidad y a determinar una mentalidad”. Tal vez sea demasiado el precio “moral” que tienen que pagar los pobladores de estos pueblos que tienen que soportar la presencia de decenas de molinos de viento que han sido instaladas junto a sus casas porque previamente habían sido rechazadas en lugares más desarrollados, aprovechándose de la vulnerabilidad social, ideológica y cultural de los pequeños núcleos rurales
MOLINOS DE VIENTO Y PAISAJE
Ángel Tomás del Río
Procedo de la Comarca de Belchite y en los últimos tiempos están surgiendo molinos de viento como setas por todo su paisaje y por el norte de Teruel. Entre sus habitantes hay opiniones de todo tipo, a mucha gente le parece bien pues son territorios que están cansados de esperar que la Administración se acuerde de ellos, y año tras año ven pasar oportunidades y los pueblos se van despoblando y envejeciendo, y los pocos habitantes que quedan están desanimados y no le ven ningún futuro al pueblo, y lo único que les ofrecen es esto, la instalación de molinos de viento. Están en el dilema de si dejan pasar esta oportunidad igual ya no tienen ninguna otra en años ¿qué hacer? A muchos no les gusta pero “algo es algo”, migajas. Las empresas buscan territorios donde haya poca contestación social. A este paso toda la comarca estará colonizada por molinos. A veces, cuando veo los molinos desde lejos, me parecen las cruces de un inmenso cementerio. Otros muchos habitantes estamos recelosos..
¿Parques eólicos, si o no?
Siempre hay que decir: “parques eólicos sí”. Si, pero no así. El cambio climático que sufrimos y la obligada defensa del medio ambiente nos exigen estar a favor de las energías renovables y los parques eólicos, en particular, han demostrado su capacidad de producir gran cantidad de energía eléctrica con una mínima contaminación ambiental. Pero estar a favor de la energía eólica, no significa estar a favor de la ubicación indiscriminada de aerogeneradores por toda la geografía. La implantación de parques eólicos en el territorio debe basarse en tres criterios:
1) Situación de los parques eólicos en una zona donde exista más recurso eólico aprovechable que en otros lugares
2) Situación de los parques eólicos cerca de las zonas donde mayor energía eléctrica se consuma para evitar las pérdidas por el transporte
3) Situación de los parques eólicos en zonas donde su instalación no implique un fuerte impacto ambiental o paisajístico.
Normalmente, sólo se tiene en cuenta el primer criterio: zonas de mucho viento. Sin embargo, como los parques eólicos suelen ser molestos e incompatibles con otros muchos aprovechamientos del territorio, tienden a situarse en zonas despobladas o con poca densidad de población, que curiosamente son las que menos energía eléctrica consumen y las que gozan de una mayor riqueza ambiental, faunística y paisajística.
¿Cómo afectan los molinos de viento al patrimonio cultural?
El patrimonio cultural, según la UNESCO, es la herencia cultural propia del pasado de una comunidad, mantenida hasta la actualidad y transmitida a las generaciones presentes, y puede ser material (edificios, yacimientos arqueológicos, obras de arte), inmaterial y natural (paisajes, bosques)
De todas las afecciones al patrimonio, la mayor es, sin duda la que afecta al paisaje, pues transforma enormemente su contemplación.
El CONVENIO EUROPEO DEL PAISAJE, en su Preámbulo señala (…) que el paisaje desempeña un papel importante de interés general en los campos cultural, ecológico, medioambiental y social, y que constituye un recurso favorable para la actividad económica y que su protección, gestión y ordenación pueden contribuir a la creación del empleo.
Que el paisaje contribuye a la formación de las culturas locales y que es un componente fundamental del patrimonio natural y cultural europeo, que contribuye al bienestar de los seres humanos y a la consolidación de la identidad europea.
Que el paisaje es un elemento clave del bienestar individual y social y de que su protección, gestión y ordenación implican derechos y responsabilidades para todos.
Las zonas más despobladas, las elegidas prioritariamente para la implantación de aerogeneradores, muchas veces en terrenos elevados, son las que a lo largo de los siglos han podido preservar de mejor manera su paisaje.
La afección de la construcción de los parques eólicos es de cinco tipos:
1) La presencia de los propios aerogeneradores, con alturas de buje de 80 m. y aspas de 60 m, con una altura total de 140 m.
2) Los tendidos eléctricos nuevos con apoyos de más de 30 m. de altura
3) La construcción de las subestaciones de transformación eléctrica
4) La apertura de caminos muy anchos para ir a cada uno de los aerogeneradores, con la alteración de los caminos y veredas tradicionales
5) El enorme movimiento de tierras tanto para la excavación de los cimientos como para la construcción de los caminos, con los posibles daños que se puedan producir en yacimientos arqueológicos no detectados previamente en la zona
Además, estamos introduciendo unos elementos de gran impacto visual sobre un paisaje de gran visibilidad (desde los núcleos de población y vías de comunicación), de gran calidad paisajística y de extraordinaria fragilidad (muy poca capacidad para absorber los cambios que se producen en él).
Además, al no tratarse de un solo aerogenerador, sino que son varias decenas, el impacto ambiental es acumulativo, lo que nos origina un impacto paisajístico irreversible, irrecuperable y crítico.
Transformar en terreno industrial y degradar lugares de alto valor paisajístico tiene un fuerte coste económico y social. El paisaje es determinante a la hora de valorar una zona, de tal forma que si las condiciones paisajísticas disminuyen, disminuye la atracción por esa zona. Cuando se publicita el turismo rural de una zona, se remarca la belleza de su paisaje, la ruralidad del entorno, el silencio, la tranquilidad, que son valores muy apreciados por los habitantes de las ciudades. Todos valoramos más unos paisajes u otros, y nos desplazamos a otros sitios para ver paisajes atractivos
Así pues, al reducirse la calidad paisajística disminuyen las posibilidades de explotación turística del territorio y disminuye su capacidad para actividades al aire libre, y origina que no se alquilen las viviendas y que la población de los núcleos rurales vaya reduciéndose progresivamente, disminuyendo considerablemente el valor económico de las viviendas y de los terrenos.
El paisaje confiere valor añadido a los productos y a los servicios que pierden prestigio al perderse el carácter natural del entorno y disminuye el consume de productos típicos de la zona. La agricultura ecológica tiene difícil el prosperar en paisajes repletos de molinos de viento.
Si se degrada el paisaje, se degrada el patrimonio cultural y degrada socialmente los núcleos de población cercanos y también produce efectos psicológicos negativos en los habitantes de estos pueblos. Se pierde tranquilidad y se limita la capacidad de “disfrutar de la vida”. Los valles, las montañas ya nunca vuelven a ser los mismos que eran. Le Corbusier, no en vano, escribió que “llanuras, colinas y montañas contribuyen también a modelar una sensibilidad y a determinar una mentalidad”. Tal vez sea demasiado el precio “moral” que tienen que pagar los pobladores de estos pueblos que tienen que soportar la presencia de decenas de molinos de viento que han sido instaladas junto a sus casas porque previamente habían sido rechazadas en lugares más desarrollados, aprovechándose de la vulnerabilidad social, ideológica y cultural de los pequeños núcleos rurales
martes, 4 de agosto de 2020
Espejismo
Algunas veces, cuando paseo por nuestro territorio, y contemplo los numerosos molinos de viento que hay por todas partes, me pasa un poco como a Don Quijote, pero en vez de ver gigantes , yo veo cruces de un inmenso cementerio......
sábado, 1 de agosto de 2020
Ha fallecido José Antonio Ortín Atienza
Falleció ayer en Zaragoza “Jose Antonio Ortín Atienza” (médico jubilado), a los 82 años de edad. Era hijo de Martín Ortín Mingarro y de Natividad Atienda (nacida en Gallur). Nuestro más sincero pésame a su esposa Aurora, hijos, Jesús y Luis, hijas políticas, Carmen y Sonia, nietos Sandra Sergio y Álvaro; hermana Teresa y demás familia.
José Antonio, excelente persona y siempre que podía, acudía a la romería de la Virgen del Carrascal, el primero de mayo, donde era recibido por amigos que se apreciaban como si de familia se tratase, entre ellos, Valentín Navarro Yus y Pedro Navarro.
En 2014 la Asociación Gaiteros de Aragón hizo un homenaje al antiguo gaitero Sebastián Gistas, nos pusimos en contacto con José Antonio, ya que su madre, Nati, fue hija del afamado gaitero gallurano Daniel Atienza. José Antonio y su esposa vinieron al evento con sumo gusto. donde saludaron a amigos y familiares. DEP.
Suscribirse a:
Entradas (Atom)