Hasta finales de los años 60 se utilizaron las eras de
Plenas. Antiguamente había varios lugares con eras dentro del término, y en
algunas parideras había eras, pero las últimas en utilizarse y las que más se
conocen están en la parte alta del pueblo, pues allí había terreno llano y el
viento, muy necesario para aventar y separar el grano de la paja, soplaba en
esa zona de manera suave y constante.
En las eras se trillaba con el trillo. Después se mecanizó
la trilla y se utilizaron enormes trilladoras movidas mediante poleas por
tractores. Parecían monstruos prehistóricos. Esta utilización de las grandes
trilladoras también se hacía en las eras.
Las eras de Plenas estaban empedradas para poder trillar
mejor. Se hacían con una suave pendiente para que el agua de lluvia y tormentas
no se encharcara y dificultara la labor de la trilla. El empedrado se realizaba
con piedras algo poliédricas, del tamaño de un puño, rectangulares, de unos 10
o 12 cms de longitud por 5 o 7 de anchura. Se hacían calles de dos filas de
piedras longitudinales y de unos 70 cms de anchura y entre las calles se iban
poniendo piedras en sentido transversal a las anteriores hasta que toda
la superficie estaba empedrada y lista para ser usada para trillar. Había expertos empedradores y venían cuadrillas especializadas en esa labor a construirlas.
Esta semana santa me he dado una vuelta por las eras y he
visto que permanecen todavía bastantes empedrados.
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