El viernes, 12 de abril, a
las 20 h. se ha presentado en la
Aljaferia el nuevo libro de Lorenzo Mediano.
Hacía tiempo que no estaba
en la parte noble del palacio y me ha gustado mucho revisitarlo. La primera vez
que lo visité fue con un grupo de compañeros del instituto y el profesor. Era
cuartel y un oficial nos enseñaba algunas dependencias . Los soldados estaban
por las estancias haciendo sus tareas. Recuerdo las paredes pintadas de blanco
y todo bastante destartalado. Carmen me comenta que su padre estuvo de militar
aquí.
Ha ido bastante gente, unos
doscientas personas al cato. Veo caras conocidas.
Esperamos en el patio y
comienza el acto con una danza del grupo Maluca
Circo. De aquí nos desplazamos a la preciosa sala donde está el mihrab;
allí continúa el espectáculo del grupo, ahora con sombras y danza, y
posteriormente pasamos a un patio interior donde sigue el espectáculo y canta una muchacha. Me
sorprende ver allí un busto de Gervasio Artigas. Una vez acabado vamos a una
sala donde se desarrolla la presentación.
En la mesa presidencial
están Juan Bolea, Lorenzo Mediano y Oscar Sipán. Presenta el acto Oscar Sipán, que recuerda que se
celebra el 50 aniversario de la librería París. Es difícil durar tanto.
Julio Cristellys, del Grupo Hélice, comenta que escribir un libro es
una acto que surge de la intimidad del autor. Recuerda a la librería París como
una librería mítica y entrañable, donde se han formado lectores y escritores,
recuerda los escaparates donde descubría a nuevos autores. Acaba comentando que
a los lectores de verdad nos gusta el libro de papel, el libro como objeto. Y
le regala al dueño de la librería un dibujo, que se lo entrega.
Pablo Muñío, el propietario, agradece el regalo y las palabras. Está contento pero
ha sido difícil, da las gracias en nombre de la familia y se despide así” y
aunque las cosas vayan mal, siempre nos quedará la París ”.
Oscar Sipán continúa el acto hablando del grupo Maluca que presentará un
espectáculo en Zaragoza, para mayo. Que el marco de la Aljafería es
incomparable. Recuerda cuando conoció a Lorenzo en una feria del libro, en
1998, firmando ejemplares de “La escarcha sobre los hombros”, que es un libro
mítico. Y que con una trilogía sobre la prehistoria tuvo un éxito sin
precedentes. Estamos rodeados de historias y el escritor capta y filtra las
historias que hay por ahí. Del estilo de Lorenzo dice que tiene una música, una
cadencia y un ritmo especial, y una forma de dialogar única que lo hace
distinto. Este libro “El desembarco de Alah” es una gran novela, como todas las
demás que ha escrito.
Juan Bolea comenta que el libro es un auténtico acontecimiento cultural en Zaragoza
y en España. Este libro es una gran historia hecha de pequeñas historias.
Recuerda a la librería París y las visitas que le hacía, y que había sido muy
importante en su formación.
Felicita a Lorenzo por su
look (va trajeado y con corbata), diciendo que es un godo vestido de Armani, y
que nos ha venido muy guapo.
De la novela comenta que es
absolutamente extraordinaria. La novela histórica es la mas difícil de
escribir. Los personajes que salen son reales y el autor se debe documentar muy
bien, abrir la mente de todos ellos y meterse dentro. En la novela se encuentra
uno en el siglo VIII y empieza a entender
lo que pasó en la invasión bereber. Habla de Tarik, un ser
extraordinario que tiene todo lo que ponía Shakespeare a sus personajes: lo
bueno, lo malo y una enorme grandeza. Pelayo parece un nuevo Hamlet, es un
perdedor, un gran personaje que los humanos somos falibles.
Hay dos importantes mujeres,
entre ellas Egilona…, Lorenzo es un
gran constructor de personajes femeninos, porque a los hombres les cuesta. El
novelista tiene que medir las pasiones, exponer las emociones. Quiere
felicitarlo también porque nos ayuda a conocer mejor nuestro país. Esta novela
lo tiene todo y Lorenzo ha hecho un esfuerzo gigantesco, da un paso de gigante
y va a triunfar.
Lorenzo Mediano da las gracias a los que han colaborado en el acto. Del edificio dice
que con solo verlo ya te transporta a otras épocas, que le hubiera gustado
haberse encerrado aquí con el ordenador a escribir la novela.
Le gusta contar cosas que no
vienen en los libros de historia.
Habla de la influencia
de Shakespeare, de su obras Hamlet,
Julio Cesar, Romeo y Julieta, y que de vez en cuando se las pone en vídeo para
escucharlas, pues el teatro es para oírlo más que para leerlo. También tiene
influencias de los clásicos griegos, que los lee y relee, Tucídides, Herodoto,
Jenofonte, Homero… la Odisea
es inigualable. Dice que en todos sus libros siempre mete alguna frase de la Iliada o de la Odisea y que en este ha
puesto el comienzo de la Iliada ,
que lo recita… El libro está muy basado en la tragedia griega, toda la obra es
un diálogo y hay personajes como Pelayo que tiene que vengarse, otro que es incapaz
de ser infiel… Tiene como moderno la fuerza del amor.
Se sabe de memoria el libro
pues lo ha corregido numerosas veces y recita párrafos enteros. El hecho de
trabajar con personajes históricos le obliga a ciertas cosas. Cada palabra que
ha puesto ha sido muy estudiada.
Ha estado cuatro años
enclaustrado, metido en la edad media… ha buscado de cada palabra su origen, su
etimología, su significado más arcaico…
Ha venido así vestido porque
esto es un bautizo. Está muy contento de cómo ha quedado la novela y del premio
que le han dado.
Oscar Sipán comenta que saber contar una historia es saber guardar muchos secretos
y que esta novela está llena de secretos y dotada de vida propia.
Se acaba el acto. La gente
se arremolina en la mesa presidencial a saludar al autor y presentadores, y nos
vamos a casa, a leer “ El desembarco de Alah”. Hace una magnífica noche
primaveral.
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